Del 8 al 13 de noviembre del 2010 en Costa Rica se llevó a cabo el III Encuentro Latinoamericano de Egresados de Rusia, Europa del Este, Asia Central y Cuba. En la preparación y realización del mismo participó activamente nuestra compatriota Nadezhda A. Gríshina. Hoy nos contó cómo un pequeño grupo activo de costarricenses, donde ella fue la única mujer rusa, pudo organizar este evento internacional a gran escala.
- Nadezhda, ¿cuánta gente que recibió educación en la Unión Soviética y Rusia, hay en Costa Rica?
- En Costa Rica hay por lo menos unos 800 egresados y en toda América Latina, unos 10 mil. También hay los que estudiaron en Checoslovaquia, Polonia, Rumanía, Bulgaria, Cuba – igual los incorporamos a nuestro grupo. Los egresados costarricenses tienen su propia organización: «Asociación Cívico Cultural Costa Rica – Rusia», que fue fundada en el año 1976 (al principio se llamaba “Аsociación de egresados de países socialistas»). Organizaciones del mismo género existen también en otros países del mundo. Los últimos años comenzaron a reunirse en otros encuentros internacionales. El primero de estos se organizó en Panamá en 2006, el segundo, en República Dominicana en 2008 y el tercero – en Costa Rica.
- ¿Cuántos egresados llegaron esta vez al encuentro?
- Se han registrado 210 personas de 23 países de América Latina. Fue el más grande de todos: en el primero llegaron sólo de ocho países y en el segundo – dieciséis.
- El encuentro en República Dominicana hace dos años, según lo que me han contado, los impresionó a todos con sus lujos y organización excelente. Ustedes después estaban muy preocupados por estar a la altura y no hacer el encuentro en Costa Rica peor que en la Rep. Dominicana. ¿Han logrado esto?
- Sí, lo logramos bastante bien, por algo en la clausura toda la sala exclamaba “molodtsý, molodtsý!” (“bravo, bravo!”). Pero nos costó muchos esfuerzos. Nuestro comité organizador formado por 12 personas, trabajó de forma abnegada en la preparación de este evento durante todo el año, y durante el último mes, se reunía cada semana. Sólo yo no pude asistir a estas últimas reuniones debido a la restricción vehicular (por la placa de de mi carro no puedo transitar por San José los miércoles), pero trabajaba en casa por la Internet y les enviaba unos pequeños informes.
- ¿Cómo sucedió que usted, mujer rusa, resultó ser miembro del comité organizador de este encuentro?
- Mi esposo es costarricense, estudió en Moscú, tengo muchos amigos entre los egresados de Rusia, y siempre trato de participar en actividades de este tipo. Aunque oficialmente, no soy miembro de la asociación, pero me pidieron a ayudar, y acepté. En general, me gusta el trabajo social, en este momento estoy en seis diferentes comité, incluyendo nuestra municipalidad.
- ¿Cómo se estaba organizando el trabajo de preparación del Encuentro?
- Comenzamos a trabajar desde el inicio del año 2010, hemos formado varios comités: el de finanzas, relaciones con los medios de comunicación, programa y cultura, encabezados respectivamente por Jorge Coto, Alexis Calderón, Alberto Coto y Emilia Fernández. Empecé a trabajar al principio con esta última elaborando haciendo listas de posibles artistas para participar en el concierto en el Teatro Nacional, en la apertura del Encuentro. La lista resultó muy larga, es información muy valiosa que podremos utilizar para algunas actividades en el futuro. Pero al final de cuentas nos quedamos con el concierto de fortepiano, por razones finacieras: los pianistas Josué González y Francisco Piedra se ofrecieron a participar totalmente gratis. Luego me dieron otra tarea: organizar el transporte y las actividades turísticas para los participantes. Esto fue más acorde con mi ocupación principal ya que soy agente de turismo. Repito, todos los miembros del comité organizador trabajaban muy intensivamente, pero más que otros, de seguro, - Hugo Cascante: Siendo el Presidente de nuestra Asociación, se encargó de hacer contactos al más alto nivel. Al principio el comité decidió no complicarse y contratar una empresa grande- ATP- la que organiza conferencias, congresos y otros eventos de esta índole de manera profesional. Comenzó a trabajar, pero a los tres meses renunció porque nuestra asociación no tenía medios para pagarles. Estamos agradecidos con ellos porque tienen la paciencia de esperar hasta que les paguemos lo adeudado por la primera etapa de trabajo, así que nos separamos como amigos. Pero después de eso, nuestro comité tuvo que enfrentar el problema de organizar todo por nuestros propios medios, y era cuando nos quedaba ya muy poco tiempo. Así que no había tiempo para descansar, todos trabajaban muy unánimemente. El problema principal, como dije, era el financiamiento. Dos miembros del comité organizador declararon que el problema era totalmente imposible de resolver y nos abandonaron. Gracias a Dios, no todos fueron tan pesimistas.
- ¿Y cómo lograron salir del apuro?
- Escribimos cartas a todas las instituciones y empresas posibles. La gran mayoría quedó sin respuestas, sólo una pequeña parte de posibles patrocinadores nos atendieron: el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) regaló lapiceros y revistas sobre Costa Rica, la Fábrica Nacional de Licores colaboró en la clausura del Encuentro, Jorge Coto, dueño de fábrica “Larisa” y miembro del comité organizador, donó los folders y papel para apuntes y pagó los rótulos y banners. Nos ayudó mucho el Sr. Oscar Kitt, gerente del Hotel Radisson, donde se llevaba a cabo el Encuentro: nos otorgó crédito tanto por una sala para reuniones como por una habitación de descanso durante un mes. Además obsequió la decoración de la sala de conferencias y rebajó los precios de alojamiento para los delegados. Algunos egresados costarricenses dieron alojamiento en sus casas a los delegados que no podían pagar el hotel, y otros transportaron a los visitantes del aeropuerto al hotel y viceversa. Según Hugo Cascante, la suma total de gastos para la ejecución del Encuentro fue cercana a los 24 mil dólares de los cuales una gran parte- 13 mil- se utilizaron pagando refrigerios, almuerzos y salas en el hotel. El pago de todas las cuentas en general se cubrió con las cuotas de los miembros de la Asociación de egresados de Costa Rica y las de inscripción de los delegados. Nuestra embajada (Rusia), lamentablemente, no pudo ayudar en el financiamiento. Pero estamos agradecidos con ellos porque nos hicieron una recepción para el comité organizador y jefes de delegaciones, lo que fue una sorpresa muy agradable.
- ¿Cuáles temas, además de la unión de todos los egresados de Rusia, fueron tocados en el Encuentro?
- Se planearon mesas redondas, ponencias, discusiones, informes. La gran mayoría de participaciones se dedicaba al tema de protección del medio ambiente, el cambio climático, uso de hierbas medicinales, asuntos económico-sociales, como por ejemplo la ponencia del delegado de México Dr. Raúl Netzhualcoyotzi “La nueva esclavitud México – Centroamericana, genero, migración y remesas”.
- ¿Alguien llegó de Rusia al Encuentro?
- Sí, como de costumbre participaron representantes de la Universidad de Rusia de la Amistad de los Pueblos (URAP): el vice-rector Evgueni Schesniak y Vladimir Timoshek, Director del Departamento de contactos con egresados. Se organizó un encuentro con los rectores de algunas universidades de Costa Rica y una presentación del video sobre el 50° aniversario de la URAP. La mayoría de los delegados presentes en el Encuentro, estudiaron en esta universidad. Su papel en la elevación del nivel educacional de la población y el desarrollo técnico-científico de los países en todo el mundo es difícil de sobreestimar. En todos los años de su existencia la Universidad graduó a más de 50 mil profesionales de 164 países del mundo en 94 especialidades. Muchos de los egresados de la URAP llegaron a ser Presidentes en sus países (Guyana, Honduras), ministros, directores de grandes empresas, rectores y decanos de universidades.
- ¿Puede recordar alguna anécdota sucedida durante estos días?
- Sí, una historia muy divertida ocurrió con mi hija Valeria. La llevé al encuentro anterior en la República Dominicana, y mucha gente la recordó porque era la única menor entre todos los participantes. Esta vez la gente-sorprendida gratamente- la reconoció : en dos años Valeria de una niña se transformó en una floreciente joven de 14 años. Pero el que se maravilló especialmente con Valeria, fue un delegado de Perú de origen libanés casado con una peruana. Comenzó a invitarnos a Perú con tanta insistencia, con el fin de presentarle su hijo de 15 años a Valeria- por lo que mi hija asustada me dijo con la cara cariacontecida: “¡No voy a ningún lado!” “Tranquila, mi amor- le dije a susurros- es una broma”. Por dicha vivimos en el siglo 21 y ¡ya no es de costumbre casar niñas a edad tan temprana!
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